Es Italia que dio a Florence sus primeras lecciones de pintura. Estudiando los frescos de los grandes mastria florentinos, marco su predileccion para los diarios de viajes. Asi, cada viaje es la ocasion de transcribir sus impresiones, sus emociones en forma de boceto y en forma de acuarelas. Ella siempre tiene una libreta y un lapiz para bosquejar las escenas de la vida cotidiana y los lugares que la inspiran en su medio ambiente.